Randall es un experto en escapar de la jaula. Desde que llegó, ha pasado por varias jaulas hasta que hemos encontrado una en la que no puede salir.
Tiene mucha maña y se cuela por los barrotes de arriba. Esto nos hace pensar que quizá viviese en un campo y se escapase.

Es un loquito nervioso, es joven y tiene mucha energía. Comparte jaula con Chestera, nuestra loquita, y se llevan muy bien. Es sumiso, en la jaula Chestera es la que manda.
Sale a jugar y pasear con los otros perros y corre de un lado para otro, nunca ha buscado follón con ninguno.

Con la gente es nervioso y simpático, se pone tan contento que le sale la alegría por todo el cuerpo. Le gustan los mimos pero se pone tenso cuando hacemos movimientos bruscos, pensamos que han podido pegarle.

Con la correa pasea bien, tira un poco porque no está educado pero nada que no pueda corregirse con paciencia y educación. Con los gatos parece llevarse bien, le causan curiosidad pero una vez cerca de ellos se asusta.