Pitu fue encontrada en la calle y por su forma de ser, estamos casi seguros que antes tenía familia.
Llegó con un collar y mucho mucho miedo....cuando levantamos la voz, corre a su jaula y se pone a temblar, si hacemos algún movimiento brusco reacciona de la misma forma.... parece que le han pegado.

Por lo demás, es un amor de perrita. Es súper cariñosa con la gente, le gusta que le den besitos y le rasquen la barriga. Si hay gente cerca, ella está ahí.

Comparte jaula con un macho y no tienen problema. De vez en cuando se pone delante del comedero y no deja comer al otro, pero si se acerca no le hace nada.
Sale a pasear con otros perros, machos y hembras y pasa de todo. Se tumba en un lado a descansar y cuando toca guardarse viene a la puerta de la jaula.

Pasea bien con correa y disfruta de un ratito fuera de la jaula. Le encantan los juguetes, sobre todo las pelotas. Cuando coge la pelota de futbol no hay quien se la quite.