Dunya fue encontrado junto a sus hermanos Masika, Haizea, Aster y Sailuk en la calle, estaban muertos de miedo cuando llegaron pero poco a poco están ganando confianza y ya buscan caricias.
Dunya es algo tímida pero poco a poco está demandando más cariño, en estar en una casa terminará de ganar la confianza que le queda y será completamente feliz.
Comparte jaula con sus hermanos y se llevan de maravilla. Además, al ser tan pequeño puede adaptarse a vivir con cualquier tipo de animal.