Adiel ha sido encontrado en la calle, solito y con mucho miedo.
Es algo miedoso al principio, nos cuesta un poco cogerlo porque nos ve muy grandes, pero una vez en los brazos está agusto e incluso ronronea.
Convive con un gato adulto y comparten cama y comida sin ningún problema.
Los perros le dan un poco de miedo, nunca habrá estado con ninguno, pero al ser tan jovencito puede llegar a corregirse y que conviva con ellos.