Lola, 3 añitos, superbuena y tranquila, de tamaño pequeño, adaptable y cariñosa.
La acaban de abandonar y está todavía un poquito triste por el trauma. Poquito a poco se le pasará, sobre todo si encuentra una buena familia que le devuelva la fe en el ser humano.
Está sanita y necesita una familia ya, porque en la perrera lo está pasando fatal.