Athos vivía con sus dos compañeros mosqueperros (Portos y Aramis) en semilibertad, en un entorno no urbano. Un hombre acudía a darles de comer, pero debido a las restricciones del COVID no pudo seguir haciéndolo e intercedió para que entraran en una protectora de l’Ametlla del Vallès. Al poco tiempo llegaron a Canópolis.
De los tres hermanos era el más lanzado de los tres. Fue el primero en integrarse y estar suelto.
Athos ha hechos unos avances espectaculares. Ahora es un perro super extrovertido y cariñoso. Le gusta mucho salir de paseo con los voluntari@s.