Jaret fue encontrado en muy malas condiciones....sus ojos estaban llenos de pus y completamente pegados, con dolor. Sus orejas tenían infección y también supuraban.
Tenía delgadez extrema y el pelo y las uñas muy feas.
Le hicimos un test de leishmania y dio positivo, así que se encuentra en tratamiento y está recuperándose perfectamente.

Es un amor de perro, aquí estamos enamoradas de lo cariñoso y buen perro que es, a pesar de todo lo que ha tenido que pasar.
Viene a saludarnos cuando oye nuestra voz, moviendo su cola sin parar, y haciendo lo posible por llegar hasta nosotros aunque vea poco.

Con otros perros es bueno, él es muy tranquilo y no tiene problema con los demás. Ahora mismo comparte jaula con una perrita joven y nunca ha tenido problema, a él le gusta estar tumbado en su mantita y que no lo molesten mucho.