Peluche llegó al albergue con nudos por todo su cuerpo, entre los que habían trozos de ramas y plantas. Además, tenía mucha otitis y esto le producía mucho dolor.
Después del tratamiento para recuperarse, y un buen baño, peluche está listo para encontrar su familia ideal.

Es un profesional del escape, salta de las jaulas y se va a investigar, por lo que hemos tenido que ponerlo en una jaula alta a él solito, donde, de momento, no ha conseguido escaparse.

Con otros perros está bien, tiene ansia por montar a las hembras pero una vez castrado, se relajará. Previamente ha compartido jaula con otros perros y no ha tenido problema, pero por el tema del escapismo, ahora está solito.

Pasea con correa perfectamente, lo que nos hace pensar que ha tenido familia antes. Quizá se escapó de su casa o vivía en un campo y nunca nadie lo buscó.

Con la gente es bueno, le gustan las caricias y los achuchones. Es un poco gruñoncete cuando queremos guardarlo en la jaula y él no quiere, pero no es nada que no pueda solucionarse con educación y paciencia.