Estaba en la calle junto a mi hermana, eramos muy pequeñas y ya empezaba a hacer frío por las noches. Tampoco encontrábamos nada para comer. Estabamos solas y a punto de morir.
Pero alguien se fijo en nosotras y nos trajo a Lara. Somos muy buenas, aunque aún somos algo tímidas. Para lo pequeñas que eramos tuvimos tiempo de sufrir mucho.
Mi hermanita ya ha sido adoptada y me he quedado muy solita, busco a alguien que me de una oportunidad.
¿Tienes un rinconcito para mi?
Contacto: adopciones@asociacionlara.org